martes, 20 de octubre de 2015

QUIQUE GONZALEZ: De haberlo sabido

   Para mi, Quique González es ahora mismo, de lo mejorcito que podemos encontrar en España. Corrijo: El mejor. Ya muchos discos y conciertos desde sus comienzos, y por supuesto, grandes canciones. Ésta es una de ellas. No necesitas amar la lluvia, la noche, la niebla o la soledad. Ni siquiera que te hayan roto el corazón hace poco, porque es el fondo emocional el que te atrapa. Su sinceridad.

   Donde hubo fuego, quedan ascuas. Y desde luego en la interpretación de esta canción saltan chispas. Solo hay que ver las imagénes del video, esas miradas cómplices o esa imagen al final de la canción con Rebeca y esos ojos que lo dicen todo.

   Pero para entender todo esto, y sin ánimo de que esto se convierta en una página de cotilleo, voy a contar un poco la historia de Quique González y Rebeca Jiménez. Tuvieron un romance que duró varios años. Puedo imaginar los comienzos de su idilio cuando Rebeca comenzaba su carrera musical y Quique lanzaba al mercado su disco "Kamikazes enamorados". Podías verlos en la noche madrileña compartiendo tabaco, alcohol y besos en una concepción romántica y urbana de alguna canción de Tom Waits, acompañados de esa niebla que intenta borrar las huellas de lo ocurrido cuando despiertas.   

Días felices, sí, de kamikazes enamorados



En el disco de Quique "La noche americana" (mi disco favorito del autor) sigue habiendo referencias al amor ("Hay cien motivos más de los que había ayer, y tu pensabas que no era real") o al sexo entregado del amante sincero (La destreza de las manos lentas entre las sombras de un hotel barato en dias que se escapan de las manos"). 

O defendiendo su amor y a su Rebequita en el tono del mejor Jamie Frasier de Outlander, en ese genial final de disco que es "Se equivocaban contigo" ("Todos decían que volverías a las andadas, todos decían que tú te irías. Se equivocaban de largo").




Luego llega la ruptura como una nube asentada sobre sus cabezas encargándose de nublar cualquier rayo de luz. Ambos publican sendos discos por separado para arrancar jirones de nubes y exorcizar sentimientos. Rebeca Jiménez hace "Todo llegará" con canciones como "No sé si lo hice bien" o la propia "Todo llegará"


"Ha sido un año sin compasión 
me he desarmado en cada esquina 
pero sé que todo llegará. 

Ha sido un año sin compasión 
tengo las suelas destrozadas 
pero sé que todo llegará 
yo sé que siempre pide más"




Rebeca está rota. Todo ha terminado. Añora un pasado sin futuro que ya nunca volverá. Sabe que todo ha terminad. Y duele tanto recordar... ¿Quién no puede identificarse con esta letra? ¿quién no ha sido nunca el/la abandonado/a?. Esto nos cuenta en "Me emborraché por tí"

"·Me emborraché por ti 
y todos me contaron 
que te vieron triste 

no cabe en una noche 
lo que yo te quise 

Anoche me bebí 
un litro de mi vida 
para ver tus fotos..."



Por su parte, Quique publica "Avería y redención". Empieza el calvario, no siempre sufre mas el despechado que el que decide abandonar. 

"Aprendí las normas al segundo día
y entonces supe que no iba a ser tan fácil.
Ya se que te inventaste todo
ya se que lo intentaste todo,
y yo no."

Llega la duda, ¿me habré equivocado?. Es posible pero el orgullo hace que lo diga con las palabras de Diego Vasallo en un versión estupenda de "La vida te lleva por caminos raros"

"Es mejor un cielo acostumbrado a defraudar 
que fabricar anhelos esparcidos por la lluvia. 
Es mejor unos labios tristes 
que cien aviones despegando
y es mucho mejor mi vida ...
si tu estás dentro."


Pero hay cosas que no le gustan y que tiene muy claras, la manipulación, el giro de vuelta, el "no lo lleves a tu terreno" de "Nos invaden los rusos"

"Ya se cómo les vas a mentir,
conozco tu estrategia,
quieren oír lo que quieres decir
y acabas dándole la vuelta."

pero sin olvidar todo lo bueno, lo que aún duele y escuece. Sabe que no se va de vacío. Quedan las fotos, los besos, las frases y las miradas y Quique nos lo recuerda con poesía

"¿Cómo voy a olvidar
todo lo que hiciste por mí?

¿Cómo voy a olvidar
todo tan deprisa?
me gustaba escuchar tus canciones
detrás de la puerta..."



Y como colofón a esta historia universal por la que todos hemos pasado al menos una vez en la vida, una canción escrita por Quique antes de que se conocieran, y que sirve como colofón y punto final a la historia: "De haberlo sabido". Todos hemos sido abandonados y todos hemos roto algún corazón, así que no hace falta explicar la letra, ni hacer hincapié en todas las miradas cómplices en el video (grabado después de la ruptura) ni en ese abrazo al final de la canción, sin reproches ni pesares, solo sentimiento y esa saudade de tí...





DE HABERLO SABIDO
De haberlo sabido
no hubiera dado todo en un principio
no hubiera sido la noche en tu espalda
ni congelándote de frío.

De haberlo sabido
me hubiera ido sin decirte nada
no hubiera sido tan duro contigo
no habria corazón en la garganta

Peor que el olvido
fue frenar las ganas de verte otra vez
peor que el olvido
fue volverte a ver

Me sobran motivos
pero me faltas tú sobre la cama
y ahora las calles están llenas de bandidos
cuando necesito de tu madrugada

cuando ya te has ido
cuando me parte en dos el alma
no hubiera dudado en quedarme contigo
de haber sabido como yo te amaba

Peor que el olvido
fue frenar las ganas de verte otra vez
peor que el olvido fue volverte a ver

1 comentario: